Porque no te gusta trabajar.
No por flojo, sino porque te encante tu trabajo y no representa ningún sacrificio o molestia. Es decir, encontraste tu vocación.
Porque hay más en la vida que solo trabajar.
Porque buscas la flexibilidad para poder mantener en equilibrio todos los aspectos de la vida que te son importantes.
Para ayudar a las personas.
Ya que tus clientes constatan que tu experiencia les permite alcanzar sus objetivos y con ello te sentirás útil y productivo a la sociedad
Por convivir con personas que comparten tus valores.
Encontrarás en esta profesión personas que comparten los mismos valores de honestidad, trabajo en equipo y cooperación que no querrás irte a ningún otro lado.
Porque deseas obtener buenos ingresos.
El dinero es una unidad de medida, del valor que ofreces a tus clientes y en esa proporción eres recompensado.
Porque amas a tu país.
Y estas convencido en que con cada empresa que se moderniza, que genere mejores productos y servicios, que genere más y mejores empleos, trascendemos a una mejor patria para los que vienen después de ti.
